Este es un sencillo homenaje a las personas que atesoro...
Gracias por la suma de abrazos y complicidad,
Por el café y el vino
Por acompañarme en el oficio de trasnochar luceros
Por el cine comentado con cervezas
Y por otras incontables peripecias
Acaecidas en este rodar de compañeros
COFRADIA
Ningún gran artista ve las cosas como son en realidad;
si lo hiciera, dejaría de ser artista.
Oscar Wilde
Me dijeron las abuelas
Entre cuentas de rosario
Que algunos aun comercian
Versos con el diablo
Susurrando antiguas fórmulas
En zaguanes
De viejas casas
De caña
Y de barro.
Me dijeron
Los Señores de perfectas capas
-Miembros desde siempre
de siniestras cortes-
Que eran seres
De oscuras influencias
Fabricantes de reyertas
Y de cultos clandestinos
Al dios Baco.
Que la oscuridad
Era su cuna
Y en los bares
Con doncellas
De papel y viento
Malgastaban
En tertulias de humo y vino
Su precario presupuesto
Mil historias
Canta el mismo viento
En los techos de la cuadra
Mas yo creo sin remedio
Que estos seres
Militantes del exceso
Esconden en sus artes
El significado oculto
De la palabra
Noche.
FAUNARIO
Un pintor
Que descifró
Enigmas
De infortunio
En los brazos
De una mujer
Desconocida
La dama cuarentona
Que atesora
Cuerpos de muñecos
Sin cabeza
El músico
Que da gratis serenatas
Cuyos pasos
Siempre flotan
Sobre las nubes
De los ojos
Sin dejar el pavimento
El joven heredero
De un imperio
De sonrisas
Que ha tejido entre nosotros
La costumbre del abrazo
El maestro que habla bajo
Y canta con voz ronca
Mientras comparte
En secreta cofradía
Todo su repertorio
Como cazador de sueños
De todos ellos
Y otros singulares personajes
Pertenecen sus figuras
De museo de cera
A la casa sin fin
En donde canta el viento